

Más que un profesor de boxeo, un hijo de Carmen de La Legua que busca el golpe certero del triunfo.
El trabajo constante y su técnica depurada lo llevaron a representar a Carmen de La Legua, el mayor logro de su carrera, en su debut profesional en el Complejo Deportivo Héctor Chumpitaz, el 15 de septiembre del 2019, cuando por decisión unánime derrotó al representante de Villa María del Triunfo, Martín Paz. Prepara a sus chicos para el torneo nacional Guantes de Bronce, que se llevará a cabo este marzo en la Bombonera del Estadio Nacional.
El profesor Danny Javier Rosales Siños sueña despierto. El deporte de los puños insufla de esperanza sus mayores anhelos personales. “Yo llevo el boxeo en la sangre, a pesar de que nunca me preparé en una escuela”.
Esquiva los golpes de la vida, con entereza, coraje y técnica. Para él, este deporte es salud y educación. “El boxeo desarrolla la autoestima, la seguridad en uno mismo; te ayuda a enfrentar los problemas de la vida”.
Combina, en perfectos golpes y diestros movimientos sobre el ring del día a día, su vocación por el pugilato y su rol de padre. “No es tan fácil trabajar por la familia y enseñar boxeo”, sostiene, a la espera de “sacar un gancho salvador que le dé el triunfo en el último asalto”, para ganar algo más en la vida.
Sus proyectos son de largo aliento, en doce intensos asaltos, con los cuales busca participar en los más importantes torneos nacionales del año, en donde se darán encuentro boxeadores de todos los departamentos y distritos de país: Guantes de Bronce, Guantes de Plata y Guantes de Oro.
“Sé que esta vez no será la excepción. Estoy seguro de que recibiremos nuevamente el apoyo de nuestro alcalde; ¡participaremos en “Guantes de Bronce!”, asevera.
Siete carmelinos se preparan para estar presentes en el primer torneo del 2020, auspiciado por la Federación Deportiva Peruana de Boxeo. Seis varones (un adulto) y una mujer, en las categorías de 57 y 64 kilos, se pararán en la legendaria Bombonera del Estadio Nacional, este mes de marzo.
“Llevamos un año trabajando a tiempo completo para este evento. Guantes de Bronce será una gran ocasión para lanzar a estos muchachos, quienes también integraron el exitoso Taller de Verano que acaba de concluir, y en el que hemos trabajado con distintas categorías: niños, adolescentes, juveniles”. Las actividades se desarrollaron gratuitamente y constituye el semillero del distrito.
Danny, boxeador profesional activo, es un deportista del pueblo, a quien podemos encontrar en la Casa de la Cultura y La Juventud, rodeado del futuro carmelino en este recio deporte. “Trabajo con mis chicos en dos turnos: con los niños de entre 7 y 12 años, de 5 a 6 de la tarde; y de 12 a más, de 6 a 8 de la noche, los lunes, miércoles y viernes”.
“Recibimos el apoyo permanente del alcalde Carlos Cox Palomino, a quien le debemos mucho; nos brinda el espacio para entrenar y el espaldarazo para participar en los torneos”, sostiene agradecido.
Danny Javier tiene “una mano derecha demoledora”: “La profesora Marina Adriana Calero Uvidia complementa perfectamente mi trabajo. Estamos al pendiente de los chicos, en todo sentido. Formamos un buen equipo”, afirma, convencido de que este deporte también es integrador.
“Trabajo duro, por mi hijos, también para mis chicos del box. Enseñar a las nuevas generaciones es un trabajo excepcional, de mucha responsabilidad”, sentencia, mientras asesta un derechazo más al costal de arena, como si este representase al enemigo de turno: el tiempo, la desesperanza, la apatía.
Así es él. Un luchador a puño limpio. Más que un profesor de boxeo; un hijo de Carmen de La Legua que busca el golpe certero del triunfo, del éxito.